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De cachorros y galos: un camino por recorrer, un sueño que alcanzar por Daniel Rueda

Día 12 de abril de 2018: elecciones a Rector y Claustro en la Universidad de Valladolid. Elecciones a dos órganos de capital importancia para cualquier Universidad. Tiempo de renovación, de afianzar proyectos y de comenzar otros nuevos, de personas que han aportado lo mejor de sí mismas para la Universidad y de personas que entran con esa misma pasión y objetivo. En definitiva: tiempo de salidas y de entradas, tiempo de cambio. Ya dijo Ernest Hemingway que un idealista es un hombre que, partiendo de que una rosa huele mejor que una col, deduce que una sopa de rosas tendría también mejor sabor. No hay renovación y no se pueden afianzar proyectos que nunca empezaron. Desfile de los cachorros de las juventudes de los distintos partidos políticos con la esperanza de resultar electos en un Claustro universitario para cobrar ese mérito en forma de cargo. Así empieza su Juego de Tronos particular.

Día 12 de abril de 2018, una aldea poblada por irreductibles galos resiste todavía y siempre al invasor. El Club de Oratoria Universitario Valladolid, alejado de la representación estudiantil pero preocupado por completar la formación de los estudiantes en el arte de la palabra y por el fomento del vínculo Universidad-Empresa, continúa con su II Curso de Comunicación Efectiva. Cómo hacer una presentación de impacto, conocer mejor los medios de comunicación, las funciones de un director de comunicación en una empresa, técnicas de argumentación y debate o cómo afrontar un proceso de selección fueron algunos de los temas tratados.

¿Por qué comunicación? Porque es necesario comunicar bien. Nos comunicamos a diario con nuestras familias, amigos, incluso con desconocidos, pero no lo hacemos de manera efectiva. Porque en algún momento tendremos que convencer a alguien de que nos seleccione antes que a otra persona o porque nuestro producto tendrá que ser escogido antes que el de nuestros competidores. Sin embargo, comunicación no es competición. Comunicación no solo es hablar, es comprender. Es entender y ser entendido. Es mejorar.

Sin embargo, nada de esto se enseña en las aulas. Pero… ¿qué haces cuando nadie te apoya en algo en lo que tú crees firmemente? ¿Qué haces cuando te sales de la norma y te señalan por ello? Tienes dos opciones. Una bastante sencilla: tiras la toalla y abandonas tus convicciones y proyectos. Otra complicada pero infinitamente más gratificante: tienes claro tu objetivo y que vas a luchar cueste lo que cueste por alcanzarlo, que no te vas a poner a tirar piedras a cada perro que te ladre en tu camino hacia ese sueño, y por supuesto, que tampoco vas a arrendar tu dignidad a intereses de terceros. Señoras y señores, a esto hemos venido. A cumplir nuestros objetivos y alcanzar nuestros sueños. Y si te cierran una puerta, procura abrirte una ventana; si quien debería no te da herramientas con las que poder ayudarte, piensa en empezar a construir con tus propias manos; y si en algún momento te sientes solo, busca dentro de ti las razones que te hicieron emprender ese camino.

Para finalizar: una recomendación, un deseo y un agradecimiento. Una recomendación: que sigáis y persigáis vuestros sueños. Un deseo: que no paréis de hacerlo nunca. Y un agradecimiento: gracias a todos los que creéis en vosotros mismos y creéis en los demás, porque sois motor del cambio.

Daniel Rueda es estudiante de Derecho y ADE. Orgulloso factorito. Apasionado de la comunicación. Disfruta de una buena conversación y reflexiona sobre lo que leo, fundamentalmente economía, política o filosofía. Siempre con ganas de aprender e involucrarse en cualquier proyecto o jaleo que surja. Una máxima: si vas a pasar suficiente tiempo por un sitio, intenta hacer algo que lo deje mejor que cuando lo encontraste.