Punto de Encuentro por Lucía Sánchez
Mi amiga Teresa me salva. No importa cuan gris sea mi día. Ella, siempre alegre y sencilla, me salva. Nos encanta contarnos la vida: cómo nos sentimos, lo que nos preocupa, nuevos descubrimientos… Juntas somos felices, aprendemos a mirar y nos hacemos mejores. Te y yo no compartimos ideología política o creencia religiosa, pero es mucho más lo que nos une: un profundo respeto, el deseo de querer y ser queridas, de mejorar, de hacernos preguntas y ayudarnos a encontrarnos. Esto fue los que nos llevó a crear Punto de Encuentro, un espacio apolítico y aconfesional para juntos profundizar en las preguntas intrínsecas a la experiencia humana; preguntas sobre la felicidad, la identidad, el amor, la libertad, la muerte, la belleza… que todos llevamos en el corazón. Queríamos compartir con otros el encuentro que nosotras vivimos en nuestra amistad.
La oportunidad que vimos descansa en tres pilares. Primero, vivimos en el mundo de la prisa, el consumo, las apariencias, la desconexión… pero, ¿sabemos qué queremos? ¿a dónde vamos? ¿quiénes somos? Punto de Encuentro es un espacio para la pausa, la escucha, la autenticidad, el pensamiento propio, la conversación. En segundo lugar, nos dimos cuenta de que no existen espacios para profundizar en estos temas desde una perspectiva transversal. Vivimos en una sociedad polarizada, con bandos enfrentados. Por ello en Punto de Encuentro no hablamos desde nuestra ideología o creencias, sino desde nuestra experiencia humana. Reunimos a personas diversas porque las preguntas que tratamos a nadie le son ajenas y requieren de perspectivas y experiencias vitales distintas. El otro siempre es un bien para nosotras. Por último, en la universidad no conocemos a nuestros profesores más allá de sus asignaturas. Queremos crear comunidad universitaria, conocernos, ayudarnos en nuestros caminos.
¿Y qué hacemos en Punto de Encuentro para ello? Organizamos cafés-tertulia en la universidad Carlos III de Madrid sobre temas existenciales. Primero interviene un invitado y después todo el que quiera puede participar contándonos su experiencia o lanzándonos una pregunta. Además, en redes sociales (@pdencuentrouc3m) publicamos frases, reflexiones y entrevistas en el blog que nos ayudan a profundizar y preparar los cafés.
Punto de Encuentro no ha dejado de traernos cosas buenas: hemos conocido personas que nos han hecho ver la vida de una manera mucho más rica, que nos han ayudado a ser mejores, nos hemos conocido más a nosotras mismas, hemos desarrollado nuestra creatividad, pensamiento crítico, habilidades de comunicación… todo ello mientras disfrutamos como niñas juntas, poniendo todo nuestro cariño en cada paso. Punto de Encuentro crece poco a poco y no puede hacernos más felices escuchar que el contenido que creamos (junto a muchas personas, amigas y amigos que publicamos) ayuda a alguien, ver que es compartido, que al salir de un café nos preguntan por el próximo. ¡Todo lo que nos queda por hacer!
Estoy muy agradecida de poder ser parte de Factoría y deseando conoceros. Si te gustaría saber más del proyecto o sobre nosotras no dudes en contactarme, ¡me encantaría saber de ti! Y ojalá veros en un Punto de Encuentro pronto. Un abrazo grande.
¡Muchas gracias Lucía por abrirnos las puertas de Punto de Encuentro en el blog de Factoría! Nos ha encantado descubrir el interior de un proyecto tan bonito en el que café a café compartís un espacio de reflexión tan importante para ampliar y desarrollar el pensamiento.