FACTORÍA DE TALENTO SEGÚN LARA STOLZENBURG
Lara Stolzenburg se acaba de graduar en Biotecnología por la UPM. Cuando hace dos años estuvo de ERASMUS en Alemania, conoció a una profesora que la introdujo en el mundo de la medicina predictiva, preventiva y personalizada, y desde entonces colabora con ella en un proyecto relativo a la cicatrización. Paralelamente está empezando un Master in Management en la Universidad Carlos III de Madrid.
Lara es una de las finalistas de la cuarta edición de Factoría de Talento. Le hemos preguntado que ha sido para ella Factoría de Talento Adecco y esto ha sido lo que nos ha escrito:
Aún guardo en mi escritorio la entrada para la charla en la ETSI Industriales, allá por octubre de 2016, en la que por primera vez escuché hablar de Factoría de Talento Adecco. No podía ni imaginar que en un año cambiarían tantas cosas, que en sólo un año esas palabras, Factoría de Talento, suscitasen tantos recuerdos, tantos sentimientos en mí.
En dicha charla, unos aún desconocidos Pablo y Ángela me convencieron desde el minuto 1 de que me tenía que inscribir al proceso de selección de este programa de emprendimiento, y eso hice. Para mi sorpresa, fui pasando de fases, hasta que llegué a la entrevista personal y, tras una larga espera… ¡me comunicaron que estaba dentro! Recuerdo perfectamente esa llamada, las dificultades técnicas que hubo (por diferencia horaria al encontrarme yo en Chile en ese momento) y la inmensa alegría que me suscitó la noticia.
Desde entonces, han pasado mil cosas en Factoría que no sé si soy capaz de expresar con palabras. Ya el primer día conocí a otros 39 jóvenes, aún algo inseguros por no saber qué nos esperaba en los próximos seis meses que duraba el programa. 40 personalidades muy diferentes, pero todas con un denominador común: unas enormes ganas de aprender y de comerse el mundo. En este tiempo en Factoría de Talento Adecco hemos asistido a encuentros con profesionales en los que aprendimos muchas lecciones, como por ejemplo los distintos significados de la palabra “éxito”; hemos tenido seminarios en los que pudimos vivir en nuestra piel qué significa interactuar con los demás, adaptarse a distintos entornos o ser proactivo; hemos tenido sesiones de coaching personal en las que pudimos trabajar nuestros puntos débiles y reforzar nuestros puntos fuertes; hemos aprendido qué significa ser líder; hemos paseado sin rumbo por parques, observando y dejando que la naturaleza nos envolviera; hemos reído, nos hemos divertido y hemos llorado; hemos trabajado en equipo, nos hemos ayudado, y lo más importante: nos hemos hecho amigos.
Poder decir que muchas de las personas con las que he vivido tantos momentos en Factoría son ahora mis amigos es, probablemente, una de las cosas que más me ha gustado de toda la experiencia de Factoría de Talento.
Para mí, Factoría es mucho más que un programa de emprendimiento. Es un programa en el que se aprenden lecciones para la vida, enseñanzas que podemos aplicar tanto en nuestra vida personal como profesional: cómo retarnos continuamente y evitar acomodarnos, cómo potenciar nuestras habilidades, cómo dejarnos llevar por la parte positiva de los demás y cómo ayudar cuando son los demás los que requieren de nuestro optimismo. Es una experiencia que nos aporta tanto en el mundo laboral como en la vida.
¡Gracias, Pablo, Ángela y Víctor; gracias, Lorena y Marta, gracias, Adecco, y gracias a todas las personas que hacen que todo esto sea posible!
Y lo más importane… ¡la proactividad no termina! Nos vemos en la Espiral del Talento 🙂
Lara
¡Gracias a ti Lara por compartir tu talento con nosotros!