Comparte Talento: María Cano. Con volar basta.
María Cano es una de las talents dela III Edición de Factoría, ha estudiado Ciencias del Deporte en la Universidad Europea y, además, hace un tiempo se embarcó en la aventura de editar un libro de poesía. María tiene mucho que contarnos sobre ella y mucho talento que mostrar y que compartir, por eso hemos querido entrevistarla para conocerla un poquito más.
Nos sorprende desde el minuto uno cuando la preguntamos por aquello a lo que dedica su tiempo últimamente y nos sorprende confesando que, fundamentalmente, se está enfocando en encontrarse y aprender cada día del proceso de llegar a un lugar que aún dice, desconoce.
“Sobre todo, estoy dedicándome a explorar cada paso hasta llegar hasta ese lugar, tengo la teoría de que definirse es limitarse, pero diré que soy madrileña, de los años 80 raspaditos, inquieta, rebelde con causa y sin efecto, soñadora, profunda de vez en cuando, desordenada, viva…”
Esta entrevista promete, hoy comparte su talento y pasiones con nosotros María Cano…
- Pues empezamos: Cuéntame, ¿cuáles son tus pasiones María?
¿Mis pasiones? Tengo varias… pero… ¡Escribir, escribir y escribir! Me gusta plasmar todas aquellas sensaciones cotidianas que nos ayudan a percibir y entender la parte más intensa del día a día, esas que a veces nos pasan desapercibidas y nos hacen caer en la rutina, olvidar lo que realmente nos hace ser. Sentir.
La música… creo que no podría vivir sin música. Levantarme sin música, viajar sin música, trabajar sin música e incluso inspirarme sin música sería prácticamente imposible. Encontrarme sin cascos a cualquier hora del día es muy difícil…
Y supongo que cuenta como pasión querer reflexionar constantemente sobre lo que la gente piensa y siente, los porqués… tratar de entender los contextos, las sensaciones y los sentimientos que hacen que la gente actúe de una determinada forma.
Creo que mis textos son precisamente la unión de estas tres cosas. La música me ayuda a sentir ese ambiente que hace que pueda recrear un contexto determinado y así, dejarme llevar y encontrar la parte más intensa del momento que estoy sintiendo, la parte más originaria y pura de esa sensación… y escribir a través de ella.
- Es muy interesante esa forma tan sensitiva y tan porosa que tienes de percibir la realidad la verdad… dime más sobre esto ¿qué cosas haces para alimentar esa sed insaciable de sensaciones y expresión?
Me gusta salir a andar, con cascos, un cuaderno y poco más. Ando durante horas hasta que dejo la mente en blanco y entonces las frases me salen solas. Me siento, y sólo escribo. Es esa sensación de recrear un estado concreto que me ayuda a escribir cosas de las que no soy consciente en otros momentos. De alguna forma me voy aprendiendo a través de mis textos.
Por ejemplo, un tema recurrente del que escribo hace años es sobre el paso del tiempo. Es curioso leer lo que pensaba sobre ello hace ocho años y lo que pienso ahora… la diferencia entre lo que haces y hacías e incluso lo que eras y eres ahora. Las cosas que voy aprendiendo y como va evolucionando en ti un mismo concepto te hace conocerte un poco mejor.
- Claro, entonces escribir te permite no solo expresar tus pensamientos sino además conocerte y ver tu progresión y la de tus pensamientos y así conocerte muy bien… ¿Desde cuándo descubriste o comenzaste con esta forma de vivir y expresarte?
Escribo desde muy pequeña. Recuerdo con 12 o 13 años noches haciendo que estudiaba exámenes, escribiendo a escondidas por si venían a preguntarme los temas…
Uno de los peores momentos que recuerdo fue una vez en clase de lengua y literatura, me pillaron escribiendo una poesía y la leyeron en alto ¡Casi me muero!, nunca nadie había escuchado nada mío… y claro, me echaron de clase una semana. Qué paradoja…Y en la misma clase me pillaron leyendo… Y mismo resultado.
- ¿En la clase de lengua y literatura? Si es una paradoja… entonces por lo que veo además de escribir te encanta leer ¿no? Tiene mucho sentido…
Si, leo, mucho… pero soy muy desordenada. Empiezo un libro, subrayo muchas frases, lo dejo a medias y empiezo a escribir sobre ellas, cojo otro de temática diferente, y a los meses me acabo el primero.
Los libros de poesía suelo leerlos enteros a la primera, pero me gusta subrayarlos… y a veces tacharlos y cambiar palabras o modificar los finales. La gente prefiere no pedirme libros prestados… También voy a recitales de poesía y presentaciones de libros de vez en cuando. Sólo con el ambiente que se crea en ellos, llego a casa y escribo. Es una forma de motivarme.
- Pues a mí desde luego me encantaría leer alguno de los libros después de ti y disfrutar de los finales alternativos, y seguro que hay mucha gente conmigo en esto… Pero mira María, yo tengo una teoría… y dentro de ésta incluye que yo creo que hablar de lo que nos apasiona nos hace ser felices, y que a veces, muchas veces… no siempre lo hacemos, dime… ¿Qué opinas sobre hablar con otros de nuestras pasiones más internas?
Hablar de ello es prácticamente definirme. Siempre me ha costado hablar de lo que siento y creo que esto comenzó siendo un recurso para hacerlo más sencillo, entenderme primero y luego hacer que los demás me entendieran.
Ahora, desde que lo comparto (hace unos 8 años), me he dado cuenta de que hay personas que se sienten identificadas con lo que escribo, o que son capaces de recrear esas sensaciones y sentirlas como propias. De alguna manera, vivir de forma intensa unos segundos.
La idea de poder sacar de la rutina a alguien durante un segundo y mostrarles esa parte más pura, más primitiva. Me hace entender el significado de compartir lo que siento.
Por otro lado, publicarlo es dejar que la gente te conozca al 100%…tus miedos, tus dudas, tus sensaciones. Al principio mostrar esa parte más interna es extraño. Es como… pues no se… ¡igual creen que estoy loca! Tienes miedo de qué van a pensar sobre ti, o más que miedo, vergüenza.
Pero es un proceso… La primera vez que tuve la oportunidad de ver las reacciones de la gente fue en una exposición que hicimos en El Escorial mi padre y yo (Narrando pinceladas) en la que yo escribía poesías sobre sus cuadros. ¡Estaba de los nervios! No sabía cómo iba reaccionar la gente… y evidentemente, hubo de todo.
Es como poner a la venta tu diario. Pero una vez que lo has hecho, ya no parece lo mismo.
- ¡Me ha encantado descubrir todo esto de ti Maria! Muchas gracias por la entrevista… Pero ahora, comparte tu talento y ¡dinos dónde y cómo podemos seguirte la pista!
“He aprendido que no hay que tener miedo y que hay que arriesgar todo y sin excusas, y por eso he decidido lanzarme y publicar mi libro, “con volar basta”. Es un libro de poesía y microrrelatos donde plasmo algunas de las reflexiones de los últimos 8 años”