Los 4 ámbitos para gestionar el liderazgo. Por Mª Ofelia Domínguez
El pasado martes los jóvenes de la III edición de Factoría de Talento Adecco realizaron el módulo de liderazgo, que fue impartido por Mª Ofelia Domínguez, una de las formadoras que ya nos ha acompañado anteriormente en otras ediciones. Cuando le preguntamos a Mª Ofelia sobre qué se puede trabajar en el liderazgo, nos contó que el módulo iba a girar en torno a 4 ámbitos:
«El objetivo principal del seminario era transmitir la necesidad de ejercer un liderazgo sostenible velando por una eficiente consecución de los objetivos, la generación de una dinámica positiva y constructiva a lo interno del equipo»
De cara a ejercer el liderazgo en el equipo es importante:
- La gestión de sí mismo: implica el propio conocimiento para gestionar la emocionalidad del líder, sus conocimientos y habilidades para alcanzar su máximo
potencial en cada momento.
- La gestión de las personas: que integran el equipo implica aprovechar su talento, potenciando sus áreas fuertes y trabajando para mejorar sus áreas de oportunidad de forma que obtengan una mejora profesional y una mayor adaptabilidad.
- La gestión de la tarea: requiere la identificación de un proceso eficiente que garantice la consecución de resultados. Este proceso comienza en la fijación de objetivos, los cuáles una vez asignados se deben gestionar a nivel individual y grupal. Es importante generar una dinámica de trabajo que permita una orientación a la mejora para estar en constante evolución
- La gestión de la relación: se debe velar por la sostenibilidad del proceso tanto desde una vertiente de tarea como humana. Así como es importante alcanzar los resultados de una forma eficiente también es necesario que el proceso genere un clima positivo y resonante, propicio para desarrollar sinergias.
Para cerrar el resumen que nos hace llegar la formadora de Factoría de Talento, es importante añadir que, como en todos los ámbitos, la innovación en los métodos y las formas de hacer, el conocimiento de uno mismo y la adaptación al cambio constante del contexto, son factores clave para acercarnos a todos los ámbitos de trabajo: nosotros, las personas, la tarea y la relación con los otros.