Lo que hagas, hazlo con pasión
Con esta frase, abría el pasado martes Margarita Álvarez, Directora de Marketing y Comunicación de Adecco, un nuevo Taller Directivo dirigido a los participantes de Factoría de Talento.
Para esta licenciada en derecho y con una dilatada carrera profesional en empresas de renombre, hay algo en el ámbito profesional innegociable: el secreto para triunfar es “currar” y disfrutar.
Además, como gestora de personas se propone cada día conseguir el disfrute y desarrollo de las personas que están a su cargo, de ahí que cada reunión con su equipo, comience con una medida del índice de felicidad profesional/personal- …Un liderazgo comienza desde la ayuda a los demás y mi punto de partida como jefe-apunta Álvarez- es conocer el nivel de felicidad de mi equipo en el trabajo. Para ello, la clave está en intentar comprender lo que a cada uno le gusta y así poder redirigirlo. Cuando tú sabes lo que le pica a cada uno, entonces haces magia– apunta.
De entre las numerosas iniciativas que ha puesto en marcha esta directiva, quizás la más conocida fuera el Instituto de la Felicidad en su paso de quince años por Coca Cola, Margarita comparte también con los jóvenes talentos de Factoría, uno de los logros que más satisfacción le ha procurado desde su incorporación en Adecco y es, la redistribución de una partida presupuestaria inicialmente para temas de marketing y comunicación, en la formación y preparación de personas donde todos sus miembros familiares están en paro. Adecco los prepara y forma para que puedan encontrar un puesto de trabajo. .. y ésta es sin duda la parte más importante de las empresas, aquella que conecta con las emociones de las personas y hace algo por ellas.
Como el día a día es duro y son muchas horas las que se pasan en la oficina, Margarita hace especial hincapié en la importancia y la necesidad de encontrar el sentido intrínseco de lo que hacemos, para que nos remueva interiormente y saque de nosotros la pasión necesaria que nos haga trabajar desde la ilusión y el disfrute…consiguiendo esto, el buen hacer vendrá solo. Y es que cualquiera puede enseñarnos a aprender cualquier cosa, pero la actitud es cosa nuestra, apunta Margarita.
Con un amplio bajage de experiencias vitales en su mochila, Margarita Álvarez derrocha energía, vitalidad y entusiasmo. Sin duda una serie de cualidades que provocaron en los asistentes al taller, una notable inyección de motivación y pasión para acometer nuevos proyectos.
